Muy cerca de ti mismo

Oigo latidos de tu alma
gestando notas y ritmos
y te sé muy cerca de ti mismo:
allí donde el silencio habita
y halla el corazón su voz y su calma.

Vuelas por paisajes no hollados,
espacios de luz, centros de misterio,
donde la belleza halle los espejos
en los que desee contemplarse siempre.

Formas y colores habitan tus ojos,
ritmos y timbres funden y transforman–
más allá de sí mismos–
pasado y presente en espacios nuevos.

Y es que tu alma canta, 
eleva sus notas, 
olvidada entonces del tiempo y su peso,
como si atendiera una sola voz,
una intimidad que se funde en ti 
y en ese misterio que la gracia ofrece
mientras los arpegios, cadencias,
acordes y notas vierten sus sonidos
en el gran silencio.


Isabel 11-4-15

… Mientras te pienso

Siempre te encuentro allí,
en la sutil sonrisa del cielo en nuestros ojos,
habitando el jardín de mi alegría.
El aire de tu aliento 
extiende más allá de sí mismo
su canción en silencio mientras te pienso.
Viaja mi corazón por paisajes
cuyos frondosos verdes 
abren mis horizontes más allá de mis ojos,
se funde en ese espacio que es vacío y ¡ tan pleno!
Respiro tu silencio
y ese cantar del agua entre las formas
como midiendo el tiempo,
y sé que entre los besos hay mucho más
que otro silencio unido, 
más que palabras que se dicen sin decir… sonriendo.
Entre las risas y en los ojos, 
brotan flores y estrellas,
ondas en círculos perfectos viajan 
más allá de los límites,
se extienden por los labios, más allá…
El misterio de luz funde su transparencia
sin opaca distancia en su acuerdo y su centro.

Isabel, 2-12-13